La Magia de un Retornado Debe Ser Especial - Capítulo 309 - Novela en Español

Capítulo 309 - Utopía (2)

Él tuvo un sueño. 

Fue un sueño perfectamente aterrador. 

En otra vida, soportó todo el dolor e incluso la hipocresía necesaria para salvar al mundo. 

Mató a un colega que una vez sostuvo el mismo ideal, y mató a incontables enemigos que lo bloquearon. 

Y perdió a sus preciados amigos en el proceso. 

Fue un terrible, terrible sueño. 

Anhelaba olvidarlo todo. 

Pero Desir sabía que no se trató solo de una pesadilla, sino de una realidad innegable. Un día, tendría que despertar de su sueño y volver a esa realidad. 

Liberado de su sueño inquieto por una alarma de su pad de comunicación, Desir comprobó el mensaje entrante. 

[—Lamento haberte contactado en la madrugada. ¿Puedes darme algo de tiempo esta noche? Me gustaría hablar contigo sobre lo que repasamos la última vez.] 

Había recibido un mensaje de uno de sus amigos, Zod Exarion. Aunque en este mundo solo eran compañeros de trabajo, Zod había sido una piedra angular de la vida real de Desir: alguien que se había preocupado por él hasta el último momento. 

—… … 

*Apretón* 

Desir agarró el pad con firmeza. 

Recientemente había estado disfrutando de un debate con Zod todos los días. Era un momento perfectamente alegre. 

Pero todo lo que pudo hacer fue estar triste. 

El tiempo presente no era más que una mentira que desaparecería cuando el Mundo de las Sombras se despejara. Y una vez que regresara, no habría más Zod Exarion. 

—Realmente, es un mundo de ensueño. 

Mientras Desir pasaba su tiempo aquí, pudo ver con sus propios ojos cuánta gente disfrutaba de esta falsa felicidad. Este era un mundo donde cada persona vivía sus propios ideales. 

El propósito de Desir era destruir este mundo, y destruir este mundo era como privar a innumerables personas de la felicidad que les correspondía. 

«¿Tengo derecho a hacerlo? ¿Es realmente mi decisión?». 

Era difícil incluso respirar bajo tal presión. 

Era literalmente el peso del mundo. 

Cuando Desir estuvo ante tal agonía, una voz mecánica ingresó. 

[La condición especial, “El peso del mundo” ha sido despejada.] 

Esto fue lo que Priscilla se esforzó por lograr. 

A Desir Arman se le permitió ver su ideal con sus propios ojos. Ella esperaba que él entendiera su intención en el sentido más auténtico. 

[Iniciando la misión principal. Debes “negar este mundo”, o “reconocer este mundo”. Una vez que lo hayas hecho, el futuro del mundo se decidirá.] 

Priscilla quería una batalla de ideología pura sin preconceptos. Esa fue la última apuesta que hizo. 

* * * * * 

* * * * * 

En una colina baja cerca del área de entrenamiento de la Academia Hebrion, Desir y Romantica pasaban su tiempo descansando en los bancos de madera de allí. 

Romantica estaba diseñando un nuevo uniforme para los aplicados estudiantes. 

—Han estado entrenando muy duro recientemente. 

—Me recuerdan a los viejos tiempos. Algo de eso es realmente inspirador. 

Desir miró hacia un lado a su apasionado dibujo, luego se tomó un momento para hacer una pausa antes de abrir la boca. 

—Romántica... ¿eres feliz ahora mismo? 

Los furiosos garabatos de Romantica se detuvieron repentinamente. Ella se volteó y miró a Desir, con una preocupación oculta en su expresión. 

—Preguntando algo así de la nada. ¿Está todo bien? 

—Nada está mal. Es solo curiosidad, eso es todo. 

—... Espera. Terminaré esto y te contestaré. 

Romantica, habiendo dado una respuesta temporal, comenzó a mover su bolígrafo de nuevo. Las líneas comenzaron a formarse sobre el cuaderno de bocetos una tras otra, y rápidamente tomó la forma detallada de la ropa. 

Desir miró a Romantica sin decir nada. Parecía estar pasándola mal durante su entrenamiento, pero ahora se veía más feliz que nunca. 

Poco después, el dibujo estaba terminado, y Romantica se lo entregó a Desir. 

—Esto es lo que quiero hacer por el resto de mi vida. Ahora que lo estoy haciendo, no hay forma de que no sea feliz. 

—Estoy seguro de que lo eres. 

Fue obvio. 

En este lugar, todos alcanzaron sus ideales. Eran capaces de hacer lo que quisieran. Era un mundo hecho así después de todo, así que nadie podía dejar de ser feliz. 

—Una última cosa. 

—Si me haces otra pregunta inútil, te golpearé con el viento. 

Afortunadamente, esta pregunta era muy ordinaria. 

—El vestido que diseñaste la última vez, ¿cuándo será lanzado? 

Romantica se encogió de hombros. 

—Bueno... no lo sé. Todo lo que puedo hacer es diseñar, así que nunca he pensado en otra cosa. 

—... Es así... 

Desir miró detenidamente durante un tiempo el boceto que Romantica le entregó. 

Era un traje de entrenamiento. 

No solo aprovechaba la practicidad del traje de entrenamiento existente, sino que también era un diseño que añadía un extraño encanto estético al agregarle varios añadidos y bordados. 

—Espero que salga pronto. 

* * * * * 

* * * * * 

Esa tarde, Desir fue a una mansión en el centro de Dresde sin ir a la academia. Era un edificio raro y de gran escala en Dresde que destacaba entre las muchas otras mansiones. 

Mientras pasaba lentamente por el portón de hierro, se reveló un jardín de rosas y otras flores. 

Alguien estaba esperando a Desir en el jardín. 

Se trataba de una belleza de primera clase con el cabello azul celeste, un individuo que sobresalía incluso entre las muchas flores. Era como una gota plateada en medio del jardín. 

Pram Schneider. Era el nombre de un amigo que nunca pudo olvidar. 

Pram miró hacia arriba y sonrió. 

—¡Estás aquí, Profesor Desir! 

No había ningún nombre en este mundo que recordara con tanta claridad. Desir respondió con una sonrisa. 

—Cuánto tiempo sin verte, Pram Germia. 

La Casa Germia. Distinguida por su noble historia, fue una familia destruida después de que Dresde fuera ocupada por una revolución popular. 

Por eso Pram nunca pudo encontrar a su padre, a pesar de haber recibido un arma muy específica y ornamentada de su parte y de haber alcanzado la popularidad nacional como miembro de la party Starling. No tenía una familia capaz de reconocerlo, y no podía encontrar una familia que no existiese. 

Pero en este mundo era diferente. Porque la revolución en sí no tuvo lugar, la familia existía, y en primer lugar Pram nació y se crio allí desde el principio. 

En otras palabras, Pram tenía una familia en este mundo. Era un sueño y un ideal que Pram siempre había deseado. 

—Me sorprendió oír que de repente querías comer con mi familia. 

Pram llevó a Desir al comedor de la mansión. El salón era tan largo como el tamaño de la mansión, y los dos podían tener bastantes conversaciones en su camino. 

—Lo siento. Tengo que comprobar algo. 

Pram inclinó su cabeza hacia lo que Desir estaba diciendo. 

—Bueno, de todos modos, mi familia y yo hemos estado anticipando tu visita. Eres una celebridad. 

Pronto los dos llegaron al comedor al final del pasillo. Cuando Pram abrió la puerta, vio a la gente que había llegado temprano y se sentó con antelación. 

—Encantado de conocerlo. Profesor Desir Arman. 

El hombre sentado en el extremo de la mesa se levantó y se acercó a Desir. Un hombre de mediana edad con el cabello celeste que se parecía a Pram. 

—Siento mucho no haber podido conocerlo la última vez que pasó por aquí, pero me alegro de poder compartir una comida como esta. 

—Gracias por su hospitalidad, Sir Germia. 

—Jaja, no necesita usar “Sir” conmigo. Ha pasado mucho tiempo desde que me nombraron caballero. 

Con una buena sonrisa, instó a Desir a estrechar la mano. Sus manos eran fuertes y firmes. Desir recordó que probablemente hubiera sido comandante del ejército Hebrion. 

—Siéntese por aquí. 

En el momento en que Desir se sentó por recomendación de Germia, las dos hermanas, que tenían los ojos brillantes, lanzaron preguntas como una cascada. 

—¡Profesor! ¿El examen de ingreso a la Academia Hebrion es realmente un Mundo de las Sombras? 

—Sí, parece que sabes bastante. 

—¡Es verdad! Pero, ¿y si hay un accidente? 

—Lo que se usa para los exámenes de entrada es un Mundo de las Sombras virtual, y está bajo el control completo de la academia. 

—¡Entonces...! 

—¡Y...! 

Como las preguntas parecían interminables, la Sra. Germia, que no había podido soportarlo, intentó detener a las hermanas. 

—Carina, Abe. Están inquietando al profesor. 

—¡Pero tengo mucho más que preguntar sobre la academia! 

—¡Una pregunta más! ¡No, solo dos cosas! No, espera, ¡tres! 

—Ustedes dos, de verdad... 

La Sra. Germia suspiró como si no pudiera evitarlo. Desir agitó sus manos. 

—Estoy bien, señora. Es una pregunta de mis futuros alumnos. 

—¡Usted es el mejor, Sr. Desir! 

—¿Puedo llamarte hermano? 

La Academia Hebrion mantenía su reputación como la mejor institución del mundo. Era el lugar más prestigioso para todos los que deseaban aprender. Así que Desir, que se convirtió en el profesor más joven de allí, era literalmente la persona que recibía toda la admiración. 

«Por eso todo el mundo decía que no les importaba que les visitara». 

Desir sonrió con cautela y respondió amablemente a las sucesivas preguntas de la hermana sin mostrar ningún signo de disgusto. 

Como el ambiente era tan acogedor, incluso la pareja hizo preguntas una por una. Como las hermanas estaban a punto de entrar en la academia, los padres también parecían tener muchas preguntas. 

—¡Es mi turno de hacer preguntas! 

—¡No, me toca a mí! ¡Acabas de hacer una pregunta! 

—¡Has preguntado dos veces! 

Las dos hermanas hacían mucho ruido, pero la comida era muy agradable y no podían dejar de reírse. Fue fácil ver que la vida cotidiana de esta familia normalmente sería tan alegre. 

Mientras Desir giraba ligeramente la cabeza, Pram miraba a sus hermanas delante de él con una mirada muy amistosa. Sus ojos mostraban lo mucho que valoraba y amaba a su familia. 

—¿Eres feliz, Pram? —preguntó Desir. 

—Por supuesto, soy muy feliz. 

Pram respondió con los ojos firmemente fijos en su familia. Aunque era una pregunta embarazosa, fue una respuesta inmediata sin dudarlo. 

—¿Por qué? 

—Porque, como puedes ver, estoy con mi familia. 

Estaba con su familia. Pram había querido esto desesperadamente, y había sucedido. 

—… … 

Habría sido un final perfecto si hubiera sido solo eso, y si realmente hubiera sucedido. 

Pero la pregunta había intrigado a Pram, así que de repente giró la cabeza hacia Desir. En el momento siguiente, Pram Germain se quedó extremadamente perplejo. 

—¿Profesor Desir? 

Sintió la tristeza que emanaba de Desir.