La Magia de un Retornado Debe Ser Especial - Capítulo 166 - Novela en Español

Capítulo 166 - Princesa de Sangre (1)

Las puertas de la ciudad se cerraron de golpe.

Lo que quedaba de los 500 hombres estaba a salvo dentro de los muros.

Después de ingresar a la ciudad-castillo, los refuerzos fueron inmediatamente recibidos con abrumadores gritos de alivio por parte de la guarnición de la ruta de suministro.

—¡Dios no nos ha abandonado!

—¡Y son lo suficientemente hábiles como para vencer a Crin de León!

No esperaban que llegaran refuerzos.

Los Forasteros habían empleado una táctica en la que la minoría usaba a la mayoría como cebo.

La guarnición de las líneas de suministros estuvo a punto de ser derrotada. Una vez que se dieron cuenta de lo que los Forasteros habían hecho, sabían que la ruta de suministro estaba prácticamente perdida.

El alto mando no se daría cuenta de esto y sus vidas se perderían.

Pero cuando los refuerzos llegaron milagrosamente, los soldados que se ahogaban en la desesperación sintieron una abrumadora oleada de alivio.

Sin embargo, tan pronto como sus cuerpos comenzaron a liberarse de la tensión contenida debido a que la situación se desvanecía, un furioso rugido resonó a través de los salones del castillo.

—¡Todos, tomen su posición y mantengan el fuerte! ¡Todavía hay un enemigo frente a nuestros ojos!

El hombre que soltó el furioso gruñido era un viejo con una larga barba blanca.

Desir sintió una cantidad extremadamente poderosa de flujo de maná circulando dentro del anciano. Era un competente mago de 5° Círculo.

Después de que el comandante de la guarnición diera la orden, se acercó al coronel Yuta y lo saludó.

—Gracias a usted estamos a salvo. Soy el Comandante Gereon y estoy a cargo de esta unidad.

Al igual que todos los demás soldados, el comandante Gereon estaba extremadamente cansado, pero una inquebrantable sonrisa se extendió por su rostro.

—Soy el Coronel Yuta. Si resistimos un poco más, la fuerza principal también llegará pronto.

—Eso es un alivio.

Sin embargo…

El suspiro de Gereon fue interrumpido cuando un hechizo fue lanzado hacia la ciudad y algunos de los edificios alrededor del castillo en donde se encontraban se derrumbaron inmediatamente.

No hubo tiempo para una conversación distendida.

—Nuestras unidad estará bajo su mando y seguiremos su órdenes.

Gereon reportó en detalle al Coronel Yuta y, después de ser informado, este dio a la ahora combinada fuerza sus nuevas órdenes y posiciones.

El Ejército Imperial se movilizó como una máquina perfecta.

Por supuesto, los estudiantes de la Academia Hebrion no estaban simplemente descansando. Ellos ofrecieron su ayuda a donde fuese necesaria, como voluntarios dentro del Ejército Imperial.

El Ejército Imperial comenzó a reconstruir las líneas de defensa.

La guarnición no iba a ser capaz de cambiar la marea solamente con el aumento de sus números. Después de todo, los Forasteros todavía los superaban ampliamente en tropas, en primer lugar.

Fue posible porque, a pesar de que el número de refuerzos que había llegado era menor que el promedio habitual, las tropas que habían llegado eran muy superiores en calidad.

Por sobre todo, uno podría decir que una unidad que consistía de las partys de la Academia Hebrion -que contenía menos de 100 personas- era una unidad de élite dentro del Ejército Imperial.

* * * * *

[Ice Flower]

[Fire Bolt]

El Ejército Imperial fue completamente capaz de dar vuelta la situación. Pasaron de ser aplastados a ganar sutilmente la ventaja. Cuando los refuerzos de Desir llegaron, aniquilaron completamente al Cuerpo Mágico de Crin de León – la principal fuerza de los Forasteros.

[Giga Tryce]

Desir continuaba desatando una serie de hechizos hasta que se le acabara el maná. Él entonces se retiraría, se recuperaría y se uniría nuevamente a la defensa.

El Ejército Imperial, poco a poco, se movilizaba a una velocidad mayor marcha y los Forasteros, que atacaban sin dudarlo, comenzaron a disminuir sus números aún más rápido.

Sin embargo, Desir juzgó que todavía no debían bajar la guardia.

«Todavía son demasiados como para ponernos cómodos. Las tropas con las que hemos estado enfrentando a los Forasteros acaban de venir de la línea del frente y están exhaustas; no pasará mucho tiempo hasta que nos veamos obligados a frenar nuestro asalto».

En ese momento, el Ejército Imperial estaba muy animado como resultado de sus refuerzos uniéndoseles, pero la guerra no era una bestia tan voluble como para ser ganada solo con el espíritu.

Si los Forasteros se reagrupaban y decidían convertir el asedio en una batalla de desgaste, la situación se volvería rápidamente desoladora.

De repente, Desir, que estaba midiendo el campo de batalla frente a él, de repente se dio cuenta de algo.

Raden, el Rey de las Montañas.

No se lo veía por ninguna parte.

Desir frunció el ceño preocupado, ya que el más grande activo militar que actualmente poseían los Forasteros, al frente de su asedio, no se encontraba por ninguna parte.

«¿A dónde se fue?».

Raden era una de las peligrosas piezas en el campo de batalla mental de Desir. Si no podía ser monitoreado, la situación podía volverse extrema en cualquier instante.

Desafortunadamente, fue en ese momento…

Un mensajero se apresuró a arrodillarse frente de Gereon, casi tropezando, y dio su informe mientras todavía respiraba con dificultad.

—¡Comandante! ¡Creo que la muralla del puerto pronto se perderá!

—¡Reporte! ¿Cuál es la situación?

—No estoy seguro del porqué, pero los soldados responsables de la guardia de las murallas se han envuelto en un conflicto interno. Los Forasteros que estaban asaltando se han aprovechado de la situación y nadie les impide subir las murallas.

El rostro del Coronel Yuta, quien se encontraba con el Comandante Gereon, se puso extremadamente pálida.

—¿Acabas de decir que estamos perdiendo el puerto… por un conflicto interno?

El Coronel Yuta no podía creer que esto estuviera sucediendo.

—¡Es menester que averigüemos lo que está pasando ahí abajo, inmediatamente! Si es cierto que hay un conflicto, la supresión del mismo tiene máxima prioridad.

Evidentemente se encontraba nervioso por lo absurdo de la situación, pero organizó una unidad y actuó con toda la calma que se puede esperar de un veterano.

Desir habló con él:

—Estoy preocupado por lo que está pasando ahí abajo. Mi party y yo nos dirigiremos hacia el puerto también.

Después de que el Coronel Yuta pensara por un breve momento, asintió con la cabeza.

—Entendido Entonces te lo encargo.

La party Starling se dirigió hacia el puerto con aproximadamente 70 soldados que fueron organizados rápidamente poro Yuta.

Fueron capaces de sentir los horrores de la guerra mientras se dirigían hacia el centro de la ciudad.

En la ciudad, que probablemente solía ser un lugar lleno de vitalidad, ahora solo había oscuridad.

«Necesitamos finalizar la guerra sin más retrasos».

No pasó mucho hasta que la party Starling llegara al centro de la ciudad y pudiera ser testigo del conflicto interno del que hablaba el soldado.

Ante ellos había dos grandes grupos de soldados, con la misma armadura, luchando entre ellos.

«¿Pero qué demonios…?».

No era lo uno podía considerar un típico conflicto interno.

—¡Espera!

—¡Alto, soy yo!

Un lado seguía siendo racional e intentaba entablar una conversación, pero el otro bando parecía haberse vuelto completamente loco.

Aquellos que estaban atacando a sus aliados no solo perdieron su capacidad de razonar. Más bien, era como si hubieran perdido su humanidad, como si hubieran sido reducidos a bestias sedientas de sangre.

—¡Aaaahhrggh!

Eran extremadamente poderosos.

Aplastaban fácilmente las piezas de armadura acorazada que llevaban sus compañeros.

—¿Este es el precio que hay que pagar para tener el poder en sus manos?

Cada vez que se movían, ya sea que simplemente daban un paso o rompían las placas de acero con sus propias manos, los vasos sanguíneos dentro de sus cuerpos estallaban en respuesta a la presión.

A pesar del gran sangrado, los enfurecidos soldados n parecían mostrar signos de detenerse. Simplemente ignoraban a los soldados que intentaban detenerlos y continuaban arrasando como locos.

Era simplemente imposible para los soldados normales resistirse a aquellos que exhibían un poder por sobre sus límites.

Lo que quedaba del Ejército Imperial racional fue apresado en un estado de confusión, y como resultado, se estaban retirando lentamente.

Pero además había otro problema.

Un soldado, que se había torcido el tobillo mientras se retiraba, cayó y comenzó a gritar mientras se arrastraba por el suelo, tratando de alejarse desesperadamente de las monstruosidades que se acercaban.

—¡Ayúdenme!

Sin embargo, era imposible que su grito fuese escuchado por aquellos que habían perdido sus facultades de razonamiento.

Uno de los insanos soldados carcomió a su ex aliado sin dudarlo.

—¡¡¡Aaahhh!!!

El soldado, que esta siendo atacado, luchó durante un tiempo mientras pedía ayuda a gritos.

Momentos después, dejó de moverse como una marioneta a la que de repente se le cortan las cuerdas.

Entonces, la party Starling fue testigo de una horrible escena.

—¡Kuurrghh! ¡Kurrrghhh!

El rostro del soldado mordisqueado comenzó a convertirse en uno ensangrentado. Entonces, en lugar de gritar por ayuda, soltó un horrible chillido.

Cuando se puso de pie, estaba en un estado de locura tal como el que lo había roído.

* * * * *

Era infeccioso.

Esta condición no identificable era contagiosa y se estaba expandiendo a través del inesperado campo de batalla.

Romantica, desconcertada, murmuró para sí misma:

—¿…Esto también es magia?

Nunca había visto un hechizo capaz de ejercer un efecto de influencia tan poderoso. Ni siquiera Desir había se había encontrado con este tipo de magia.

Un hombre, que hasta hace un momento era un aliado, comenzó a atacar a otros para infectarlos y eventualmente ser asesinado por sus propios amigos.

¿Cuántas soldados serían capaces de mantener el ingenio en esta misteriosa situación?

El Ejército Imperial estaba siendo atacado por sus propias fuerzas, sin poder actuar adecuadamente, y el número de soldados que perdían su racionalidad aumentaba exponencialmente.

Desir gritó a los que estaban en pánico.

—¡Si es posible, suprímanlos en lugar de matarlos! ¡Si se trata de un hechizo afiliado al control mental, entonces deberíamos ser capaces de romperlo destruyendo el canal o demoliendo el hechizo del mago!

Terminó su comando invocando un hechizo.

[Bind]

El hechizo de restricción que invocó Desir iba dirigido a algunos soldados que estaban intentando infectar a un grupo que aún estaba cuerdo.

Aquellos, quienes se habían resignado a simplemente observar la desastrosa escena despistadamente, comenzaron a moverse también.

Los soldados se emparejaron. Entonces, empezaron a enfrentarse a los que los abordaban.

Pram fue el primero en tomar la delantera.

Sostuvo su estoque y se dirigió hacia la retaguardia de los insanos soldados.

Uno de estos infectados se dio cuenta de la presencia de Pram y corrió hacia él con una lanza, corriendo hacia delante a una velocidad inusual. Este tipo de velocidad era imposible para cualquier soldado normal.

*Swish*

Pero no fue lo suficientemente bueno como para seguir el ritmo de Pram, que había refinado su habilidad y velocidad hasta llegar al Rango Torre.

Pram leyó rápidamente la trayectoria de la lanza, la esquivó, y luego pateó al soldado, poniéndolo de rodillas. Luego golpeó su cuello con la empuñadura del estoque, con la intensión de noquearlo.

*Wham*

—¡Kruuaaarrgghh!

Sin embargo, no sirvió de nada.

El soldado infectado trató de atravesar a Pram una vez más.

El soldado se enderezó mientras Pram retrocedió para esquivar su ataque.

No le había afectado de ninguna manera.

«Ni siquiera se desmayó. Esto es difícil».

Si era difícil para un Rango Torre como Pram, entonces sería aún más difícil para los soldados regulares.

«Entonces solo hay una manera…».

Pram le echó una mirada a Desir.

Después de que Desir lo mirara, suspiró y asintió como si fuese inevitable.

Cuando Pram obtuvo su respuesta, se volteó a mirar al soldado que tenía delante. El soldado estaba corriendo hacia Pram justo a tiempo.

—Lo siento.

Pram se puso en posición, como si reforzara su resolución. Luego se deslizó hacia las piernas del soldado que corría hacia él.

*Crrraaack*

Un sonido aterrador resonó por todas partes.

Pram rompió las piernas del irracional soldado en un instante y continuó con los demás.

La respuesta de Romantica fue la misma. Después de regular el poder de sus hechizos, apuntó solamente hacia las piernas.

*Baang* *Baaang*

—¡Kraaarrggh!

Los insanos soldados, habiendo perdido las piernas a causa de Pram y Romantica, soltaban horribles chillidos cuando sus movimientos fueron detenidos por la fuerza.

Dentro de la party Starling, quien tenía la mejor habilidad para manejar los problemas en este tipo de situación fue Adjest.

Su magia de hielo era muy adecuada para restringir los movimientos de sus oponentes.

[Frost Fog]

Una fría niebla se extendió por todas partes.

Bajo el control de Adjest, la niebla comenzó a congelar a todos los soldados que se habían vuelto locos.

Los soldados que la rodeaban comenzaron a congelarse, comenzando por sus piernas antes de extenderse a su mitad inferior, y finalmente congelarse completamente.

Bajo la experta dirección de la party Starling, la situación en el centro de la ciudad fue rápidamente resuelta.