Capítulo 40 - Servicio de Cocina (2)
Mientras Desir se dirigía hacia el Portal de las Sombras, Adjest se puso al lado del resto de la party como si fuese la cosa más natural del mundo.
Había una incómoda dosis de tensión entre Adjest y Romantica.
Romantica todavía estaba muy disgustada con el hecho de que Adjest se hubiese unido a su party.
Era difícil para ella aceptar a Adjest ya que su reciente confrontación aún estaba presente en su mente.
“¿Así que abandonaste completamente la party Blue Moon?”, preguntó Pram.
“Así es”.
Romantica hizo una mueca mientras la conversación continuaba.
Desir suspiró, parecía que se requeriría un gran esfuerzo antes de que Adjest pudiera integrarse completamente en su party.
“¿Cometí un error? Tal vez realmente debí haberlo hablado con Romántica con anticipación… Pero ciertamente necesitamos cuatro miembros para ingresar a este Mundo de las Sombras”, pensó Desir.
A diferencia de Romantica, Desir recibió con gran satisfacción la inclusión de Adjest.
Necesitaban un miembro más para poder participar en el Mundo de las Sombras que él había establecido como su próximo objetivo y no había nadie más capaz que Adjest.
“Ella llegó en un buen momento”.
Fueron capaces de entrar al Mundo de las Sombras de la provincia de Orrane.
Este era un Mundo de las Sombra que Desir había estado planeando abordar durante mucho tiempo debido a las recompensas que podían obtenerse al eliminarlo.
“Dicen que los Armamentos de Toa pueden adquirirse en este Mundo de las Sombras”.
Los Armamentos de Toa. Era un artefacto que aumentaba la reserva de maná de un mago, permitiéndoles alcanzar una mayor destreza.
En el futuro Laberinto de las Sombras del que provino Desir, él estaba vinculado a este artefacto.
Fue esa la razón por la que pudo llegar al Tercer Círculo.
Sin embargo, Desir no fue el primer poseedor de los Armamentos de Toa.
Originalmente fue propiedad de un mago de la Academia Hebrion y ese mago pudo llegar al 5° Círculo.
A pesar de ello, ese mago había muerto en el Laberinto de las Sombras y, debido a la política de su grupo de expedición, el artefacto le fue entregado al sucesor más apropiado, quien resultó ser Desir.
Había dos razones por las que Desir era considerado el más apropiado para heredar el artefacto.
En primer lugar, la capacidad de los Armamentos Toa para aumentar la reserva de maná era mayor para los magos de los Círculos inferiores y, en segundo lugar, la capacidad de análisis de Desir ya había ganado notoriedad dentro del grupo de la expedición.
Con una reserva más grande de maná respaldando su capacidad de análisis, la contribución de Desir a la expedición se consideró insustituible hasta el punto en que el plan ejecutado nueve años después sería imposible sin él.
“Para llegar a ser tan fuerte como lo era antes, necesito tener en mis manos ese artefacto”.
Sabiendo que su mayor debilidad era su reserva de maná, Desir buscó información sobre el artefacto.
Aunque naturalmente vendría a adquirir el Artefacto debido a la muerte de su predecesor, realizó una extensa investigación y planificación para llegar primero al Artefacto.
Afortunadamente, él ya sabía un poco sobre el Artefacto incluso antes de estar atado a él, que es como sabía sobre este Mundo de las Sombras.
Sumergido en sus pensamientos, Desir llegó frente al Portal de las Sombras antes de que diera cuenta.
“Desir Arman, Romantica Eru, Pram Schneizer, Adjest Kingscrown. ¿Estos son los miembros que intentan enfrentarse al Mundo de las Sombras de la Provincia del Norte, Orrane?”, preguntó el Guardián del Portal en un tono profesional.
“Eso es correcto”, respondió Desir, quien, como líder de la party, actuó como su representante.
“¿Estás de acuerdo con todos los términos y condiciones que acompañan la participación en un Mundo de las Sombra?”.
“Estamos de acuerdo”.
“Entonces abriré el Portal de las Sombras. El área conectada será la provincia de Orrane. Puede haber alguna desorientación después de la transferencia espacial, así que tenga cuidado”.
Una vez que se completaron los controles preliminares, el Guardián abrió el Portal de la Sombra y una luz cegadora envolvió a la party.
[Has entrado en el Mundo de las Sombras]
Cuando Desir abrió los ojos y miró a su alrededor, todo lo que pudo ver fueron muros de piedra.
La habitación era espaciosa y caliente. Había una enorme olla de sopa hirviendo sobre un fuego chispeante y ardiente.
Utensilios de cocina, como cuchillos y cucharones, estaban esparcidos por aquí y por allá.
Había verduras, salsa recién preparada y pan de trigo, brillando con aceite.
“Esto debe ser una cocina”.
Desir echó un segundo vistazo por la habitación, pero no encontró nada más que destacar.
Adjest, Pram y Romantica, el resto de su party, no estaban por ninguna parte.
“Esto debe ser lo que quisieron decir cuando dijeron que se nos asignarían diferentes roles”.
El sonido de la apertura de una puerta atrajo la atención de Desir.
Un hombre abiertamente regordete ingresó.
Parecía muy enfadado, a Desir le sorprendió que un hombre de tal estatura pudiera parecer tan hostil.
[Has conocido a Jefran Eastwood, Chef Veterano. Un profesional terco con mucho orgullo y confianza.]
“¿¡Qué estás haciendo, estúpido zoquete!”.
Antes de que Desir pudiera reaccionar, el chef señaló los ingredientes frente a Desir y lo abofeteó.
Desir se vio sorprendido por el golpe, pero, basándose en su experiencia como veterano que ya había superado múltiples Mundos de las Sombras, permaneció tranquilo mientras bajaba la cabeza.
“Lo siento”.
“¡Largarte! ¡Estás en el camino, idiota inútil!”.
La respuesta de Desir tuvo el efecto previsto de no provocar más al chef.
Jefran simplemente empujó a Desir y se acercó a la tabla de cortar para preparar las verduras.
Su cuchillo golpeó furiosamente contra la tabla de cortar, lo suficientemente fuerte como para asustar a la gente que estaban afuera.
Desir lo observó tranquilamente mientras intentaba comprender el escenario que lo rodeaba. El chef le lanzó una mirada furiosa.
“¿Qué haces parado como un idiota? ¿Te convertiste en una estatua? ¡Te dije que no tenemos tiempo! ¡Maldición! ¡Ayúdame con la cocina, imbécil!”.
“¿Cocina?”.
Justo cuando Desir estaba empezando a entender su papel, el chef le dio un golpe a Desir en la nuca con frustración.
“¿Acaso eres un simio idiota? ¡Te dije que hoy tenemos que servir a un invitado distinguido! ¿No me digas que también olvidaste el menú?”.
[La misión del servicio de cena ha comenzado. Usted es el asistente del chef y debe preparar una comida para los 13 invitados de honor que visitan el castillo. Los platos que la cocina debe preparar son los siguientes:
Aperitivo: 2 Ensaladas de aceitunas negras, 4 Marinadas de ostras y camarones a base de hierbas, y 7 Cremas de sopa de cordero.
Plato principal: 13 filetes de carne de ternera con puré de papas y zanahorias al lado, el bistec debe cocinarse de la siguiente manera: 3 bien hechos, 5 medios, 3 medio raros y 2 raros.
Postre: Pastel de chocolate (cortado uniformemente en 13 porciones).
Ayuda al chef a preparar con éxito el servicio de comida. El resultado de esta búsqueda afectará la búsqueda general.]
“No lo olvidé, Chef”, respondió Desir con voz tranquila.
“Entonces repítemelo, ¡rápido!”.
“2 Ensaladas de aceitunas negras, 4 Marinadas de ostras y camarones a base de hierbas, y 7 Cremas de sopa de cordero. Estos son los aperitivos...”.
"Está bien. Eso es suficiente. ¡Ve a preparar las verduras!".
“Sí”.
[Jefran ha notado tu expresión determinada y ha elevado su afecto hacia ti al nivel ‘Bueno’. Su afecto afectará la progresión de la misión de ahora en adelante]
“¿Cuántas veces tengo que repetirte esto? ¡Dirígete siempre a mí como 'Chef' al final de tus oraciones!”.
“¡Sí,Cchef!”.
Las zanahorias estaban cubiertas de tierra, las cebollas estaban sin pelar y la lechuga tenía caracoles arrastrándose sobre ellas, en el fondo del barril.
Desir se sacudió un poco de suciedad y comenzó a lavar las verduras.
“¿Se llamaba Jefran?”.
El sonido del cuchillo de Jefran se reanudó y continuó sin descanso.
Por el rabillo del ojo, Desir espió al chef.
“Ese hombre…”.
Desir observó cómo Jefran abría las ostras bien selladas con el filo de su cuchillo y retiraba perfectamente el molusco, sin dejar nada atrás.
En una exhibición de velocidad cegadora, los camarones pronto fueron retirados de sus cubiertas de manera similar.
“Habla como un marinero, ¡pero es muy hábil!”.
La preparación de los camarones ya se había completado.
Jefran aceitó su sartén y colocó las ostras y los camarones sobre ella.
“Esta búsqueda no es tan difícil. Solo tengo que igualar su ritmo como asistente”.
Desir preparó las aceitunas y trajo las verduras para la ensalada. Se sacudió el agua y se aseguró de que todo estuviera listo antes de llevarlas a Jefran.
“¡Revuelve la sopa para que no se pegue a la olla!”, Jefran señaló.
“¡Si, chef!”.
La sopa estaba hirviendo en la olla sobre el hogar.
Desir agarró el cucharón de madera y se puso a trabajar.
Sin darse cuenta, Desir dejó escapar un quejido cuando comenzó a agitarse.
La sopa estaba tan pegajosa que era extremadamente difícil de revolver. Agarró el cucharón con ambas manos y agitó con todas sus fuerzas.
“¡Qué caliente!”.
El calor de la estufa hizo que sintiera como si todo su cuerpo se estuviera quemando.
Estaba caliente y era difícil, pero Desir aguantó sin detener su movimiento de agitación.
[Jefran calificó altamente tu determinación]
El chef debe haber estado observando a Desir revolver obstinadamente la sopa en el ambiente caluroso.
Mientras Desir se movía, Jefran terminó la ensalada y los aperitivos de mariscos.
“Vierte la sopa en sus tazones. Recuerdas cuántos, ¿verdad?”.
“¡Si, chef!”.
La comida estaba finalmente lista. Jefran hizo sonar una campana en la cocina y varias personas entraron para llevar y servir los aperitivos.
Ahora era el momento de preparar el plato principal.
Los 13 invitados iban a comer lomo de ternera con guarnición de puré de papas, zanahorias, berenjenas y otras cosas.
“Date prisa y cocina las papas. Lleva un tiempo cocinarlas”, dijo Jefran, quien ya había comenzado a preparar las zanahorias y las berenjenas.
“Ya los estoy cocinando chef”.
“… ¿Qué? ¿Desde cuándo?”.
Los ojos de Jefran se ensancharon y el aroma fresco de las papas cocidas inundó la cocina.
“Noté la velocidad de su cocina y pensé que podríamos necesitarlas pronto, así que las preparé con anticipación. Soy un asistente competente”.
Desir se había adaptado rápidamente a su papel en la cocina.
“Maldita niño, haciendo el listo conmigo, eh”.
[El Maestro chef Jefran agradece tu previsión]
A pesar de las palabras que usaba, el tono de Jefran sonaba afectuoso.
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