La Magia de un Retornado Debe Ser Especial - Capítulo 267 - Novela en Español

Capítulo 267 - La Bestia del Apocalipsis (7)

La cantidad de rayos que formaban el cuerpo de la Bestia del Apocalipsis se había reducido considerablemente. 

Los humanos disparaban incesantemente hechizos de artillería, sin querer dejar pasar su oportunidad de victoria 

Numerosas chispas y un festín de explosiones de hielo surgieron del cuerpo de la Bestia. 

*Thud* 

La Bestia del Apocalipsis rondaba nerviosamente. 

Pronto, una intensa ola de rayos salió de su cuerpo. 

*Zzzzzzzap* 

Un destello cegador y una onda expansiva se extendió a su alrededor. 

—¡Aaaaahhhg! 

La cantidad de hechizos de artillería que incesantemente inundaban se redujo debido al ataque que se extendió en todas las direcciones. 

En ese momento, la Bestia del Apocalipsis comenzó a moverse hacia Desir. Había llegado a la conclusión de que él era la mayor amenaza presente. 

*Crash* 

*Crrrash* 

El cuerpo, conformado por rayos en sí mismo, derretía todos los obstáculos en su camino. Parecía un tsunami de rayos. 

Desir vio al monstruo de rayos acercándose a él y golpeó su báculo. 

*Thud* 

En el momento en que su báculo tocó la torre, un hechizo comenzó a desplegarse desde el extremo del mismo. 

El hechizo se extendió rápidamente alrededor de la torre, bañándola como una gota de tinta que se dispersa en un charco de agua. 

Comenzó en lo alto de la torre y pronto llegó hasta los sótanos. 

[System Control] (Control del Sistema) 

Esta torre era una estructura diseñada para utilizar grandes cantidades de gemas mágicas para crear fenómenos más allá de lo que los humanos eran capaces de arrojar, superando sus capacidades. 

Desir puso bajo su control la esencia de esta investigación a la que Skull Mask había dedicado su vida. 

*Crrrrack* 

La fuente de energía que se utilizó para crear los Mundos de las Sombras artificiales comenzó a funcionar bajo su control. 

*Vruuuuuum* 

En ese momento, un sonido como el de cientos de personas susurrando simultáneamente, emanó de su boca. 

— - - - - - - - - - - - - 

Al mismo tiempo, una matriz de hechizos, hermosa más allá de las palabras, se desplegó frente a sus ojos. 

Al principio, las runas de la matriz de hechizos fueron grabadas una por una, pero pronto fueron dibujadas a una velocidad increíblemente rápida. 

Entonces, comenzaron a tomar una forma particular. 

Fue una técnica de hechizo que Desir reprodujo en los tiempos modernos interpretando un poder trascendental, algo que se extinguió hace mucho tiempo en este mundo. 

A medida que su voz continuaba, el despliegue de los hechizos se hizo más y más inmenso. 

—¡Aahhhgggrr...! 

Desir se tragó su voz, sintiendo su garganta como si casi hubiera explotado. Sentía un intenso dolor, como si su cuerpo se estuviera desgarrando en pedazos. 

Era solo una sensación de dolor, pero Desir sabía que, si continuaba por más tiempo, no se saldría con la suya por el simple hecho de sentir dolor. 

Este era su cuerpo diciéndole que se detuviera ahora mismo. 

Consiguió suficiente maná para organizar un hechizo draconiano, aprovechando las innumerables piedras mágicas de la torre, pero no había ningún sustituto de Priscilla que pudiera restaurar su cuerpo deteriorado. 

Sin su ayuda, ciertamente no terminaría solo con la pérdida de un ojo. 

Sin embargo, Desir no se detuvo. 

—No quería usar esto ya que no he podido probarlo, pero... 

[Circle Synchronitazion] (Sincronización de Círculo) 

*Cliiiiing* 

Apareció otro hechizo, completamente diferente al que se estaba desarrollando frente a él. 

Era un hechizo que preparó de antemano antes de que la Bestia del Apocalipsis apareciera por completo en este mundo. 

El hechizo que Desir creó con su cuerpo y alma comenzó a desplegarse a gran escala. 

*Crack* 

Se escuchó el sonido de un hueso rompiéndose. 

Desir sintió un dolor extremadamente agudo, lo suficiente como para olvidar el dolor de todo su cuerpo siendo desgarrado. 

Sentía una cantidad tremenda de dolor en sus Círculos, un órgano similar a un segundo corazón para los magos. 

Desir sintió un dolor inimaginable. 

— - - - - - - - - - - - - 

Sin embargo, él resistió. 

Si dejaba de organizar el hechizo por no poder superar el dolor, todas las penurias que atravesaron se irían por la borda. 

Esta era la oportunidad que se había creado a través de los innumerables sacrificios de otros. No podía dejar que esta oportunidad se le escapara de las manos. 

Asimilación de Círculo. 

El hechizo que Desir ideó por sí mismo fue para reconstruir sus círculos de maná para permitir la asimilación de uno externo. 

Solo había una razón para crear este hechizo. 

Para permitir la invocación de un hechizo draconiano. 

Era para usar un poder trascendental, algo que estuviera más allá de la capacidad de los humanos de invocar. 

Debido a que Desir organizó un hechizo draconiano con sus propios círculos de maná en Deltaheim, tuvo que soportar toda la carga él solo. Sin embargo, con este hechizo, fue posible compartir la carga. 

Desir sintió que el espacio entre el círculo de maná artificial hecho en la torre y sus propios círculos de maná desaparecían. 

Y con esto, la carga de organizar el hechizo draconiano se redujo enormemente. 

Sin embargo, esto todavía no sería suficiente. 

*Thud* 

En ese momento, Desir se arrodilló. 

Los vasos sanguíneos de todo su cuerpo estallaron y la sangre fluyó libremente. Su visión se volvió borrosa y comenzó a perder la vista. 

El límite de esta asimilación de círculo era un solo círculo. 

Incluso si dos partes compartían la carga del hechizo draconiano, esa carga no era algo que alguna de las partes pudiera soportar tan fácilmente 

No obstante, Desir no se desprendió de su báculo y continuó organizando el hechizo draconiano. Miraba al frente con su visión nublada por la sangre. 

La Bestia del Apocalipsis nunca había dejado de acercarse. 

La ciudad destruida fue solo la precursora de lo que había planeado para Desir y el resto de la humanidad. 

«Con esto...». 

Desir extendió la mano con gran dificultad. Reveló el último hechizo que había preparado mientras organizaba el draconiano. 

[Sacrifice of Nirvana] 

El dolor disminuyó y el deterioro de su cuerpo se detuvo. 

— - - - - - - - - - - - -. 

No es que el arreglo del hechizo draconiano se haya detenido. Los efectos colaterales de la organización del hechizo draconiano habían desaparecido por completo. 

*Crrrrack* 

En cambio, la torre comenzó a rugir. 

Sacrificio del Nirvana. 

Este hechizo había redirigido toda su carga a la torre que había sido asimilada con los círculos de maná de Desir. 

En otras palabras, ahora el hechizo draconiano estaba siendo organizado por el círculo de maná de la torre, que operaba junto a Desir. 

La torre temblaba sin cesar, pero no se derrumbaba. Esto se debía a que era una estructura esencialmente hecha en una forma tal que podía operar un vasto círculo mágico para formar los Mundos de las Sombras. 

Ya no había ninguna distracción que obstaculizara los cálculos de Desir. 

Desir se limpió la sangre que le goteaba y se puso de pie. 

«Este es el fin». 

La Bestia del Apocalipsis no se dejó intimidar por los despliegues del hechizo draconiano frente a sus ojos. 

[¡Kaaarrgh!] 

*Zzaaap* 

*Zzzzzzzap* 

Poderosos rayos ardieron alrededor de la Bestia cuando esta rugió. 

Las seis colas se agitaron simultáneamente. 

La Bestia sacó todo su poder para enfrentarse a un humano. 

Sabía bien que el hechizo que se estaba preparando delante de sus ojos no podía ser manejado si conservaba el poder que le quedaba. 

*Crack* 

*Grrrind* 

Los rayos que se elevaron comenzaron a unirse en un solo punto. En poco tiempo, habían empezado a formar gradualmente una esfera. 

Era casi como un sol hecho de rayos. 

Entonces... 

* * * * * 

* * * * * 

—¡No escatimen en el uso de gemas mágicas! ¡Mantengan la máxima velocidad! 

Había una aeronave que se movía rápidamente hacia Pittsburg. 

A bordo de dicha nave se encontraba Zod, el Gran Sabio, y los otros miembros de la Torre de Magia a su comando. 

Zod suministraba su maná para alimentar a la aeronave mientras tocaba el piso de la cubierta con su báculo. 

No era tan rápida como la Valkiria, pero la aeronave estaba hecha con la última tecnología de la Torre de Magia y tenía una velocidad tremenda. 

Cuando se añadieron a la operación una gran cantidad de gemas mágicas y el maná de Zod, el motor de la aeronave literalmente explotó con fuerza. 

A pesar de que actualmente estaba estableciendo récords de lo que tal dispositivo era capaz de hacer, casi seguro que tendría que ser reemplazado por completo antes de que la nave se volviera a utilizar. 

«Un monstruo mágico, la encarnación misma del trueno...». 

Zod, que fue informado de la situación en Pittsburg a través de la magia de la comunicación, no pudo ocultar su ansiedad. 

Se dijo que la fuerza de la Bestia del Apocalipsis era mayor que la de Dadeneuf. 

Debido a que Zod se había enfrentado a Dadeneuf, sabía mejor que pocos lo increíble que esta criatura era. 

«Con los hechizos que Desir ha estado preparando hasta ahora, puede ser posible entrar en acción. Pero no hay garantía de que podamos ganar». 

Zod se tragó sus pensamientos. Él quiso usar un hechizo de teletransportación de inmediato para dirigirse rápidamente a Pittsburg. 

Sin embargo, debido a la considerable distancia, al hacerlo, su maná se agotaría y probablemente se convertiría en una carga para sus aliados. No podía arriesgarse a ninguna acción que empeorara la difícil situación. 

Por lo tanto, lo mejor que pudo hacer fue mantener la potencia de la nave y moverse lo más rápido posible. 

Según sus cálculos, faltaban diez minutos para llegar a Pittsburg. 

Zod seguía comprobando la hora. 

En ese momento, un hechizo de comunicación llegó a través de su bola de cristal. 

[—Maestro de la Torre, nos hemos unido a Donovan.] 

Fue una llamada de Priscilla. 

—¿¡Recién te uniste a él ahora!? 

Priscilla respondió a Zod, quien levantó la voz ligeramente mientras se quejaba. 

[—No hay nada que podamos hacer. No tenemos a nadie capaz de suministrar tanto maná como tú, viejo.] 

Era cierto. Zod se dio cuenta de que se había enfurecido un poco y empezó a hablar con voz calmada. 

—Apreciaría mucho que se dieran prisa. Nosotros nos uniremos a Desir primero, así que contáctanos tan pronto como... 

De repente Zod dejó de hablar y miró al cielo. 

—-¿Maestro de la Torre?] 

—... Priscilla, mira al cielo. 

[—¿Qué quieres decir? ¿Por qué debería mirar...] 

Priscilla, quien miró al cielo con dudas, notó la anomalía al igual que Zod. 

El cielo, que había estado despejado hace un momento, se estaba oscureciendo poco a poco. No estaba oscuro debido a las nubes, y tampoco era un eclipse. 

Era algo radicalmente diferente. 

[—¿Qué demonios está pasando?] 

Priscilla planteó una pregunta. 

—No estoy seguro. 

No había nadie allí que tuviera una respuesta a esa pregunta. 

Había muy pocas pistas para seguir. 

—Pero una cosa es segura... 

Zod levantó la mirada y observó hacia Pittsburg. 

Incluso a esta distancia, Zod pudo sentir una gran cantidad de maná agitándose. 

En otras palabras... 

—La batalla de Pittsburg... está llegando a su fin. 

El sol perdió su luz, y pronto el mundo entero cayó en la oscuridad.