Capítulo 108 - Comandante (2)
El ambiente en el salón se desplomó rápidamente.
Las partys en la sala se miraban de reojo, evaluando la postura de cada uno sobre este asunto apremiante.
—Tú... definitivamente estás loco. ¿Tu cerebro se ha paralizado por al miedo? ¿Realmente tienes la intención de dejar que los plebeyos nos guíen?
—¿No es esta nuestra mejor opción? —Radoria abrió la boca.
—Si alguien tiene la suficiente preparación para hacerlo, creo que es justo que tome el mando. Como se trata de Desir, el llamado “Héroe de Prilecha”, no hay nada más que decir. ¿Qué piensan ustedes?
Si alguien de su party no estuvo de acuerdo, no expresó su opinión.
Radoria se encogió de hombros y se paró detrás de Desir.
Los miembros de la Party del Dragón Rojo hicieron lo mismo poco después.
—La líder de la party Red Dragon, Radoria Von Dorich, entrega el mando de la party Red Dragon a Desir Arman.
—¿¡Por qué!? ¿Cómo sucedió esto?
Antes de que alguien pudiera procesar la situación, tanto la party Red Dragon como la party Blue Moon, que pertenecían al escalón más alto de la Academia Hebrion, estaban ahora bajo el mando de Desir.
Hace solo un año, esto hubiera sido algo por lo que uno sería ridiculizado por siquiera imaginarlo.
Era ridículo pensar que una party compuesta de plebeyos pudiera mostrar habilidades superiores a las de una party de nobles, y mucho menos que una party de nobles eligiera voluntariamente seguir las directivas de una party plebeya.
Como resultado de esta acción inesperada, el ambiente en el pasillo se invirtió por completo.
Nobles que previamente habían expresado un evidente desprecio por colaborar con plebeyos ahora habían cambiado incondicionalmente de opinión.
—¿No sería mejor trabajar con ellos?
—... Aunque se trata de una party de plebeyos… pero será más seguro unirse a ellos ya que las partys Blue Moon y Red Dragon están allí.
—Tampoco me gusta, pero no se puede evitar. Nuestras vidas están en juego aquí.
Uno a uno, se pusieron del lado de Desir, y en poco tiempo, partys enteras decidieron unirse a la recién formada redada de Desir.
Los estudiantes continuaron posicionándose detrás de Desir.
Por supuesto, no todos se unieron voluntariamente a la party de Desir.
Los únicos que mantenían su oposición a esta idea fueron Welca, la primera persona en plantear su objeción, y los miembros de su party.
Ellos permanecieron al otro lado de la habitación a Desir, desafiantes hasta el amargo final.
Welca miró a Desir y frunció sus labios varias veces antes de abrir la boca.
—Bueno, si realmente debes ser el comandante, entonces está bien. Te permitiré tomar el control de nuestra party. Considera que es un honor para ti comandarnos.
—Esto no fue fácil, pero tomaste una decisión realmente importante.
—Bueno, sí. Entonces…
Desir la interrumpió.
—Tomaste una decisión tan difícil que no puedo evitar compensarte.
—¿Qué?
—Te daré una oportunidad especial de ganar fama".
* * * * *
"¡¡¡Haaaaaaah!!!"
Los gritos resonaban cuando la gente gritaba a todo pulmón.
Era ensordecedoramente fuerte.
A la profesora Bridget le dolían los oídos, pero se negaba a levantar las manos para taparse los oídos.
Sus ojos estaban pegados a los paneles delante de ella, y no se atrevía a moverse por miedo a perderse el más mínimo detalle.
La atmósfera se transformó rápidamente de una de shock y horror a una atmósfera un poco más positiva y esperanzadora.
Animarlos era todo lo que podían hacer, incluso si las partys no podían oirlos.
«... No puedo creerlo. ¿Realmente van a despejar la tercera fase sin permitir que nadie salga herido?»
—¿Los estudiantes pueden despejar un Mundo de las Sombras de Clase 4 tan rápidamente? ¡Esto seguramente no tiene precedentes en nuestra historia de Competiciones de Partys!
El panel de visualización mostraba la redada conformada por estudiantes despejando la mazmorra a una constante pero rápida velocidad.
Los monstruos que custodiaban la mazmorra se derretían bajo su ataque y las trampas se desmantelaban fácilmente.
Parecía que la incursión simplemente se realizaba sin obstáculos a través de la mazmorra.
En este punto, Bridget se preguntaba si esta tercera fase de la mazmorra era realmente equivalente a un Laberinto de las Sombras de Clase 4.
Ella sentía que debería haber habido más bajas por despejar un calabozo de este calibre.
Desde que Desir intervino para asumir el mando como comandante de la incursión, la atmósfera en la sala de los jueces se había invertido considerablemente.
Los estudiantes y espectadores que estaban observando no podían dejar de animar a la situación que continuaba cambiando para mejor.
La voz de Desir sonó a través del Pad.
[Los monstruos aparecerán pronto. Prepárense para la batalla]
[Es un monstruo venenoso, mantengan la distancia y utilicen magia para lidiar con él]
[Habrá una trampa en este punto. Por favor preparen la magia de detección]
El liderazgo de Desir fue excepcional al liderar una party de seis miembros.
Sin embargo, cuando el número de personas que dirigía creció al nivel de una gran redada, su liderazgo se destacó aún más.
Desir no tenía ningún talento especial para realizar tales incursiones. En cambio, tenía mucha más experiencia que nadie.
Experiencia que obtuvo a través de numerosas batallas en las que tuvo que arriesgar su vida y vivir con las consecuencias del fracaso.
Esta experiencia le permitió comprender las características de sus enemigos mejor que nadie y también predecir con precisión lo que sucedería en el futuro con solo pequeños fragmentos de datos con los que trabajar.
—¡Pronto se abrirán paso a la izquierda!
Por otra parte, la gente que él estaba liderando, todos irían a despejar el Laberinto de las Sombras en el futuro.
Desir ya era muy consciente de la mayoría de sus habilidades, fortalezas y debilidades. Más de lo que incluso ellos mismos eran conscientes.
—Haripon, ¿puedes bloquear el apoyo del enemigo en el flanco derecho con [Raise Earth]?
Identificaba con precisión las fortalezas y debilidades de los que dirigía y las utilizaba en los lugares correctos, en los momentos adecuados.
Él solo se apegaba a los fundamento básicos del mando, pero realizaba estos conceptos básicos a un nivel de dominio mejor de lo que cualquiera de los presente sería capaz.
Bridget continuó monitoreando silenciosamente el panel que estaba frente a ella. Sin embargo, su curiosidad se apoderó de ella.
La persona más cercana a ella era el Profesor Pelstar.
—¿Por dónde se están abriendo paso ahora?
—Acaban de atravesar la mitad de la tercera etapa.
—¡Qué rápido...!
—Sí, es muy rápido. Se están moviendo a un ritmo mayor al doble del que esperábamos.
Bridget sintió que la sensación de agonía que la había estado asfixiando hasta ahora comenzaba a aliviarse un poco.
Poco después de formar la redada, ya habían atravesado la mitad de la tercera etapa.
Independientemente de cómo se organizaron o colaboraron las partys, nadie esperaba que despejaran la mazmorra tan rápido.
«Sobre todo, que los plebeyos y los nobles unan fuerzas...»
Esta fue la primera vez desde la guerra civil de hace diez años.
Bridget tenía dudas cuando Desir sugirió unirse con los nobles.
Pensaba que no tenía ninguna posibilidad de prevalecer contra la supremacía noble que dominaba a Hebrion.
Sin embargo, Desir demostró su legitimidad a través de sus acciones pasadas y su elocuencia al hablar.
Su legitimidad se vio reforzada por el apoyo de las dos primeras partys.
El resultado final fue que su party fue incluido en la redada. Sin embargo, no se detuvo allí.
¡Desir se convirtió en el comandante de la redada!
¡Tomó el mando de una incursión que se componía en su mayoría de nobles!
Después de que Desir fuera elegido para dirigirla, surgieron numerosas quejas y preocupaciones de parte profesores a quienes no les agradaban los plebeyos.
—¿Por qué ese plebeyo es el comandante?
—¡Averigua cómo ponerte en contacto con las personas dentro del Mundo de las Sombras ahora mismo!
—¿Por qué Argelia no tomó el liderazgo? ¡Si entran en la tercera etapa, seguramente habrá innumerables bajas!
Sin embargo, ahora todos estaban sentados en silencio, observando los paneles con sus bocas bien cerradas, maravillados por la magistral conducción de Desir.
El profesor Pugman Nifleka fue el principal ejemplo de este fenómeno.
Como si negara que su arrebato inicial incluso haya sucedido, ahora estaba observando con calma como la incursión fácilmente despejaba la mazmorra.
Dentro de la mazmorra, la situación no era muy diferente a la de la sala de jueces.
—¿Creo que la party de vanguardia es la que inicialmente se opuso a la redada?
—Han estado tomando la delantera todo este tiempo.
—¡Ellos están llorando! Parece que están felices de tener la oportunidad de abandonar esta mazmorra de forma segura.
—¿Qué tan felices tienen que estar para estar llorando por eso?
Varios murmuraban entre ellos, debatiendo cosas que podrían hacer que Welca se desmayara si los escuchara a alguno de ellos.
A pesar de que todos estuvieron de acuerdo en unir fuerzas, fueron muy pocas partys las que siguieron las órdenes de Desir sin dudarlo.
La mayoría de los líderes de sus respectivas partys habían entregado a regañadientes el mando de su party a Desir, y expresaban un profundo menosprecio por la decisión de Argelia de negarse a liderar.
Siempre que fue posible, se quejaron de Desir a sus espaldas y optaron por confiar su supervivencia a la formidable fuerza de las partys Blue Moon y Red Dragon.
Cuando Desir daba una orden, los miembros de las partys la seguían a regañadientes.
Sin embargo, a medida que continuaron avanzando, se hizo más y más evidente que la aptitud de Desir para comandar superaba con creces las suyas.
¡Comenzaron a aceptar de manera inconsciente a Desir como su líder y comenzaron a seguir sus instrucciones voluntariamente!
«Lo que ha logrado Desir es fenomenal. No solo unir a todas las partys, sino también dirigirlas...». La profesora Bridget continuaba contemplando.
«Si continúan con este ritmo, deberían ser capaz despejar la mazmorra sin sufrir más bajas».
La seguridad de los estudiantes ya no estaba en riesgo.
Bridget finalmente pudo suspirar de alivio al darse cuenta de eso.
«Entonces, todo lo que queda de nuestro lado es... encontrar al culpable».
«El culpable está entre nosotros».
El Imperio Hebrion había tomado conciencia de los peligros presentados por los Forasteros debido a los acontecimientos ocurridos en la Unión del Reino Occidental celebrada en Prilecha.
Como precaución, habían establecido un encantamiento especializado dentro de la escuela.
Todos los profesores de magia, incluida Bridget, habían participado en el diseño e implementación del mismo.
El encantamiento fue diseñado no solo para ser poderoso, sino también para notificar de inmediato a los profesores de magia si fuese desactivado o manipulado.
Era imposible pasar a través de esta barrera sin ser descubierto.
En otras palabras, el culpable ya debería haber estado dentro de la escuela antes de que la barrera mágica fuese invocada.
El culpable probablemente era un Forastero.
Si así fuese, iba a ser difícil identificarlo de una manera simple.
También podría haberse disfrazado de otra persona.
«Dado que manipularon las variables establecidas en la piedra mágica, debe ser alguien habilidoso en el manejo de las piedras mágicas...»
Bridget giró su mirada ligeramente hacia el profesor Pelstar
Pelstar era un erudito con autoridad en el campo de los estudios de los Mundos de las Sombras, y también era tan hábil que incluso podía crear Mundos de las Sombras virtuales con esas piedras mágicas.
De hecho, él era quien organizaba la Competencia de Partys todos los años, creando su propio Mundo de las Sombras virtual sin ningún otro propósito más que el de la competencia.
En otras palabras, si quería manipular el Mundo de las Sombras utilizado aquí, era completamente posible para él hacerlo.
«¿Cómo se involucró?... La piedra debería haber estado asegurada hasta el día antes de la competencia...».
Pero Pelstar parecía ser sincero en su pesar por lo ocurrido. Incluso comenzó a llorar cuando estos eventos se desarrollaron en las pantallas frente a ellos.
Bridget sacudió la cabeza.
«Es demasiado pronto para estar segura. Antes que nada, necesito reunir más información».
Bridget solo podía seguir pensando tranquilamente.
—...
Numerosos profesores de la Academia Hebrion se reunieron en esta sala.
Entre ellos, había un profesor mirando en silencio el panel de comunicación.
Su estómago se retorcía de rabia al observar que la situación se desarrollaba de una manera drásticamente diferente a como la que había planeado.
Fingía admirar la redada, aplaudiendo cuando era apropiado para no sobresalir de los demás.
Sin embargo, había comenzado a sentirse un poco nervioso por lo inquietante de esto.
«Es solo cuestión de tiempo antes de que comiencen a investigar esto».
—¡Yuuuujuuu!
La party de asalto había superado otro obstáculo.
La emoción invadió la sala mientras todos aclamaban.
Mientras gritaban, él retorció el anillo en su dedo para apaciguar su creciente ansiedad.
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